Tres legisladores y el miembro de la Corporación Nacional para el Desarrollo por el Partido Nacional se pronunciaron contra los planes de la empresa Aratirí, acusaron al gobierno de falta de transparencia y denunciaron que la minera sigue contratando exfuncionarios del gobierno frenteamplista
Pablo Melgar (en El País, 25/7/11)
No bastó con la triple interpelación. A los blancos les sobran dudas sobre el proyecto de Aratirí. Ven que la empresa no para de contratar técnicos que integraron el gobierno y temen que en 40 años quede solo un gran hoyo y mucha contaminación.
Fue una noche de blancos y los palos fueron para el gobierno y la minera Aratirí. El viernes pasado la agrupación Sinergia de Alianza Nacional, liderada por Santiago Ferrés, se presentó en sociedad. Para mostrarse por primera vez organizó un foro de intercambio entre líderes nacionalistas que fijaron posición sobre los planes de la minera de capitales indios.
Sinergia resolvió sentar a su líder entre el público y escuchar a otras figuras. Para ello convocó a los diputados Mario Silvera, Luis Lacalle Pou y José Carlos Cardoso. También llamaron al director de la Corporación Nacional para el Desarrollo (CND), Rodrigo Goñi.
El primero en hablar fue Mario Silvera, representante del departamento de Treinta y Tres y el primero en advertir los riesgos de la megainversión. Dijo que Aratirí provocará daños medioambientales, sociales y pondrá en riesgo la salud humana. Relativizó la generación de empleo frente a la pérdida de la matriz productiva de la zona.
Silvera señaló que la presencia de Aratirí en su zona de influencia política provocó choques entre los vecinos. «La gente que está a favor o en contra ya no se dirige la palabra. Se perdió el ambiente de comarca», dijo el legislador olimareño.
Por su parte, el diputado rochense José Carlos Cardoso subrayó que se enteró hace dos años del proyecto cuando hace cinco que los está manejando el oficialismo. Subrayó que la empresa no aportó suficiente información sobre las características del negocio. No obstante, insistió en su idea de rediscutir la propiedad de determinados recursos naturales, entre ellos el hierro.
«La empresa dice que invertirá US$ 2.800 millones para la extracción del recurso, algo parecido a lo que sucedió en África durante 500 años», se lamentó. «El 91% de las ganancias serán para Aratirí, el 5% para el Estado y el 4% para los dueños de los campos. ¿No deberíamos comenzar a pensar en nacionalizar el recurso?»
Cardoso señaló que él defendió la nacionalización del agua en 2004 por lo que se siente con autoridad para plantear la iniciativa. A esto agregó que es partidario de nacionalizar todos los recursos naturales que generen energía.
«Esto no es cambiar las reglas de juego, Naciones Unidas admite el derecho de los Estados a nacionalizar sus recursos, a la vista está el ejemplo de Chile», destacó el legislador, en referencia al proceso de aquel país con respecto al cobre.
El diputado blanco denunció que a la contratación del exdirector de Puertos Fernando Puntigliano como gerente general, la empresa Aratirí sumó la de la exdirectora nacional de Medio Ambiente Alicia Torres. Agregó que la empresa firmó la mayor parte de los documentos en el período anterior.
Al poder «le picó bicho del capital»
«Me interesa mucho lo que estás diciendo, vine a escucharte», le dijo Matilde Rodríguez de Gutiérrez Ruiz al presidente de la Cámara de Representantes, Luis Lacalle Pou, cuando subían ambos en el ascensor a la presentación de Sinergia.
Lacalle no tiene dudas: «no quiero que salga el proyecto de Aratirí así como está», afirmó en el foro de Sinergia. Anunció que en caso de que el proyecto se concrete, se sumará a la idea de su colega José Carlos Cardoso y reclamará la nacionalización del hierro.
«Entre el gobierno de Vázquez y el de Mujica se actuó en secreto, ocultando a la población lo que sucedería con Aratirí. Tal vez por la soberbia de las mayorías que creen que pueden hacer todo sin que nadie les diga nada», aseveró.
El diputado, que se entrevistó con el presidente de la compañía, aseveró que «hay que discutir el concepto de prosperidad, de nada sirve tener capital si no se puede salir afuera». Reivindicó para el Partido Nacional la bandera del medio ambiente y recordó que en el gobierno de Lacalle se creó un ministerio para eso.
«Estamos frente a un gobierno que le picó el bicho del capitalismo como a pocos. Los que estamos acá creemos en la dimensión humana de la política», dijo.
Dudas. Para el director blanco de la CND, Rodrigo Goñi, «al gobierno no le gusta la transparencia». Recordó que el oficialismo «no aceptó debatir» y que el presidente se pelea con los medios y la primera dama quiere «una prensa propia».
«El tema de Aratirí se ha manejado en medio de la oscuridad y cierta frivolidad completa un círculo vicioso donde domina la hipocresía y el sistema pierde credibilidad», mencionó Goñi. Destacó que los blancos obligaron al gobierno a hablar sobre Aratirí.
